Giro d’Italia 2014./ CC Engie Italia Giro

Apuntes del Giro d’Italia 2016

Etapa 2: Arnhem - Nijmegen (Países Bajos)

Fernando Alcalá-Zamora
2 min readMay 8, 2016

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Gigantes

Fernando Alcalá-Zamora

El ciclismo tiene fama de deporte anticuado. Sí, los maillots son productos de alta tecnología; y la posición del ciclista sobre la bicicleta se estudia en túneles del viento; y sí, ¡ay!, en el ángulo oscuro de un cuadro de carbono puede ocultarse un motor eléctrico. Pero ni ello cambia la percepción.

Los aficionados siguen corriendo a la cuneta de las carreteras a recoger los bidones de plástico, los ciclistas se ponen a punto antes de cada etapa a un palmo de la muchedumbre y las retransmisiones televisivas apenas han evolucionado en los últimos veinte años.

Además, se mantiene un rasgo distintivo: el ciclismo sigue obligando a hacer volar la imaginación. Salvo excepciones, el primer tercio de las etapas carece de señal en directo. En la edad de los partidos de fútbol del torneo de niños emitidos por Cuatro, nuestro anquilosado deporte profesional se mantiene en negro.

Es algo con lo que convivo feliz. El carrusel del domingo a las cinco agoniza y las crónicas de los partidos de Copa de Europa jugados en el continente han perdido capacidad de atracción. El cronista de ciclismo sobre el terreno, sin embargo, sigue manteniendo en su caja de herramientas el tarro de las esencias: su texto es la Verdad; sus apreciaciones personalísimas son el haz de luz sobre la oscuridad.

No pude ver la segunda etapa del Giro disputada en el corazón de los Países Bajos, así que corrí a leer las crónicas. La jornada, vista en directo, debió ser anodina y predecible. La historia que mi mente fue dibujando narra la hazaña de un gigante alemán, de pelo rubio, que lanza un ataque de caballería invencible y letal.

Un gigante alemán, de apellido Kittel, alza los brazos./ © Giro d’Italia

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Fernando Alcalá-Zamora

Fútbol femenino, ciclismo y Copa de Europa en primavera. Editor de Las Islas.