Ataca Alberto
Tour de Francia 2017 | Etapa 13: Saint-Girons - Foix
Desde hace unos años, los narradores y comentaristas de ciclismo españoles llaman a los deportistas de nuestro país por su nombre de pila. Mientras que los ciclistas de otras nacionalidades –o españoles sin el beneplácito de las masas– son referidos con pulcritud, al traspasar el cordón sanitario de los Pirineos se da rienda suelta a la pasión.
Usar el apellido, o nombre completo, transmite sensación de seriedad y proyecta una imagen en la que el periodista se sitúa a una distancia prudencial de los hechos. Romper esas fronteras virtuales desvirtúa la narración deportiva. Y, además, es insufrible.
Cuando el monumento al ciclismo que responde a las iniciales T.d.G. se mueve, lo hace sabiendo que el anuncio “¡Ataca Thomas de Gendt!” creará un impacto gracias al aura que se ha creado. Para mí, los “¡Ataque de Alberto!” o “Veremos qué tal marcha hoy Alberto” son borrones cargados de sentimentalismo que distorsionan y toman parte de un lado concreto de la competición. La pompa desaparece.
Llámenme exagerado, pero habría preferido que en la agitada etapa entre Saint-Girons y Foix se narrase el ataque conjunto de los ciclistas que responden al nombre de Alberto Contador y Mikel Landa. Con sobriedad.
- Etapa 1: gigantes desgraciados (Düsseldorf - Düsseldorf)
- Etapa 2: caos (Düsseldorf - Lieja)
- Etapa 3: la frontera (Verviers - Longwy)
- Etapa 4: un peón real (Mondorf-les-Bains - Vittel)
- Etapa 5: auto de fe (Vittel - La Planche des belles filles)
- Etapa 5, cara B: verde, blanco y rojo (Vittel - La Planche des belles filles)
- Etapa 6: papel (Vesoul - Troyes)
- Etapa 7: vista de pájaro (Troyes - Nuits-Saint-Georges)
- Etapa 8: cigüeñas sobre ruedas (Dole - Station des Rousses)
- Etapa 9: la nada (Nantua - Chambéry)
- Etapa 10: lágrimas (Périgueux - Bergerac)
- Etapa 11: simulacro (Eymet - Pau)
- Etapa 12: maillot amarillo (Pau - Peyragudes)