El 2021 del Real Madrid femenino
2021, el primer año natural completo en la historia del Real Madrid femenino, tuvo todo lo que se le pide a la montaña rusa del fútbol profesional. Doce meses de ascensos, caídas en picado, ilusión y adrenalina; más victorias que derrotas, y más héroes –heroínas– que villanos.
En perspectiva, la constante que describe el año en su conjunto es crecimiento. El de una plantilla que superó todas las expectativas y regaló a los aficionados madridistas pequeños, aunque muy simbólicos, triunfos: un subcampeonato de liga, la primera clasificación para la fase de grupos de la UEFA Women’s Champions League y, tras el verano, un hueco entre los ocho mejores equipos femeninos de Europa.
Por el camino ha cambiado la plantilla, el entrenador y hasta el campo de juego. Sin embargo, la principal diferencia radica en la confirmación de que, ya sí, la exigencia y las expectativas son las asociadas a cualquier equipo que sale a defender la camiseta del Real Madrid. El fútbol femenino era tierra por descubrir para el club, ahora es un continente a conquistar.
Así lo contamos en La Galerna
Todo ese camino, cada curva en el recorrido, lo he podido narrar en La Galerna, medio que desde el primer momento apostó por dar su merecido espacio a la nueva sección del equipo. Entre crónicas y análisis, en 2021 hemos publicado 50 artículos sobre el Real Madrid femenino. El ejercicio de constancia ha merecido la pena, pues importan las narraciones individuales de cada partido disputado pero también la hilazón de cada una de esas piezas y su visión de conjunto. A una derrota dolorosa puede seguirle una sucesión de victorias; el fútbol requiere un ejercicio continuo de análisis micro y análisis macro. Y en la hemeroteca de La Galerna el lector dispone de ambos elementos.
Disfruto escribiendo cada una de esas pequeñas secciones del puzle. La crónica de fútbol es un género abierto a la creatividad, a la construcción de historias y, en mi opinión, una excusa fantástica para hablar sobre la vida y la naturaleza humana con el deporte como hilo conductor.
Repasando estos doce meses, recuerdo la tarde de enero en la que una diminuta jugadora se convirtió en gigante; la primera victoria ante un gran rival; una remontada de película; y, especialmente, los partidos de ida y vuelta de la eliminatoria en la que el Real Madrid femenino consiguió un billete para disputar la máxima competición europea.
Cada fin de semana se abre esa ventana mágica de noventa minutos, con mismo escenario, mismas reglas y mismos protagonistas, en la que el fútbol sigue siendo capaz de ofrecer nuevos relatos y giros de guion. Ocurrió en 2021 y lo seguiremos contando en 2022.